El atacir de la muerte del 156, corresponde a multiplicar el numero trece (13), tradicionalmente conocido como numero fatal, por 12, que es el numero de casas astrologicas y/o signos.
En el caso de la carta solar de Andrés Aylwin, al poner en movimiento este reloj, se marca exactamente, para la fecha del deceso, como el atacir del Asc, conjunto al SOL y Mercurio, se pone en la cúspide de la casa VIII, la casa de la muerte.
Asimismo en ese instante, Neptuno se pone sobre Urano, que en esta carta es el regente de la casa VIII, de la muerte.